lunes, 29 de septiembre de 2008

¿Por qué se mata un escritor?

Encontré este "Reportaje-Historia", de Héctor Abad Faciolince, se los comparto. Para leerlo completo sigan este link, del diario español El pais.com
La última promesa de la literatura americana, David Foster Wallace, se quitó la vida hace un par de semanas. A partir de este caso, el escritor colombiano analiza qué ha significado el suicidio para muchas otras figuras de las letras.

Se dice, con más razón que sorna, que el único riesgo profesional de los poetas es el suicidio. No sé si hay estadísticas, pero tengo la impresión de que los escritores se suicidan más, proporcionalmente, que los mortales de otras profesiones. Si hago un rápido censo mental, muchos nombres se me vienen a la mente desde la antigüedad hasta hoy, mujeres y hombres: Safo, Lucrecio, Séneca, Silva, Larra, Woolf, Salgari, Trakl, Lugones, Mishima, Pizarnik, Hemingway, Plath, Márai... Y el pasado 12 de septiembre, la gran promesa de la narrativa estadounidense, David Foster Wallace, a quien hallaron ahorcado en su casa; un novelista de 46 años que ya en otras ocasiones había pedido que le protegieran de su propia pulsión de quitarse la vida.

Primo Levi le dedica el sexto capítulo de Los hundidos y los salvados al suicidio de Jean Améry. Dice Levi que "su suicidio, como todos, admite una nebulosa de explicaciones". Esa misma nebulosa se ha empleado después para tratar de explicar el suicidio del mismo Levi, llevado a cabo -al parecer- más para evadir la enfermedad que para huir de las pesadillas memoriosas de Auschwitz. Ocurrió en 1987, aunque con la ambigüedad que muchos suicidas prefieren, de modo que las familias puedan aferrarse a la duda de un accidente: se precipitó por el hueco de las escaleras del edificio donde vivía, en el barrio de La Crocetta, en Turín, sin dejar carta de despedida.
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David Foster Wallace (Ithaca, Nueva York, 21 de febrero de 1962 - Claremont, California, 12 de septiembre de 2008) fue un escritor estadounidense, autor de novelas, cuentos y ensayos. Era profesor de escritura creativa en el Pomona College de Claremont.
Wallace era conocido principalmente por su novela de 1996 La broma infinita,
que ha sido considerada por la revista TIME una de las 100 mejores novelas en lengua inglesa desde 1923

Foster Wallace ha sido un escritor precoz, un ironista triste y extremo en sus planteamientos, tanto lingüísticos y literarios como vitales. Publicó su primera novela, The broom of the system (1987) a los 24 años y funcionó en un mercado donde triunfaban Bret Easton Ellis y Paul Auster. Según el New York Times, Foster Wallace "intentaba darnos un retrato, mediante una combinación de juegos de palabras propios de Joyce, parodias literarias y una aventura cómica picaresca, sobre un Estados Unidos contemporáneo que ha enloquecido".

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