lunes, 8 de enero de 2018

HOY SE RECUERDA A CARMEN CONDE.

Ausencia del amante

He vuelto por el camino sin hierba.
Voy al río en busca de mi sombra.
Qué soledad sellada de luna fría.
Qué soledad de agua sin sirenas rojas.
Qué soledad de pinos ácidos errantes...
Voy a recoger mis ojos
abandonados en la orilla.


CARMEN CONDE, la primera mujer elegida académica de número de la Real Academia de la Lengua, ocupando el sillón "k", en 1978. 

Carmen Conde Abellán nació el 15 de agosto de 1907 en Cartagena (España). A los siete años se trasladó con su familia a Melilla, donde vivió hasta 1920. Empezó a trabajar en 1923 como Auxiliar de la Sala de Delineación de la Sociedad Española de Construcción Naval. Al los 19 años comenzó a estudiar Magisterio en la Escuela Normal de Maestras de Murcia.
En 1927 conoció al poeta Antonio Oliver Belmás y empezó a publicar poesía. El 5 de diciembre de 1931 se casó con Belmás y crearon la primera Universidad Popular de Cartagena. En 1933, ambos fundaron la revista Presencia, órgano de la Universidad Popular de Cartagena. A partir de este momento Carmen Conde sería una incansable maestra, agitadora cultural y poeta a lo largo de toda su vida. En 1934 publicó Júbilos, prologado por Gabriela Mistral e ilustrado por Norah Borges. Trabajó como Inspectora-Celadora de Estudios del Orfanato de El Pardo hasta 1935. Al estallar la Guerra Civil, Oliver se unió al ejército republicano al frente de la Emisora Radio Frente Popular n. 2 y e estallido de la Guerra hizo que, en julio de 1936, renunciaran al proyecto de acudir a la invitación de Gabriela Mistral (entonces Cónsul de Chile en Lisboa), antes de viajar a Francia y Bélgica, para estudiar las instituciones de cultura popular en aquellos países, para lo que Carmen había obtenido una pensión. La década de 1940 fue literariamente muy productiva En 1941, Carmen se instaló en la calle Wellingtonia de Madrid, en un inmueble propiedad de Vicente Aleixandre, que residía en la planta baja. Desde 1944 a 1951, colaboró en Radio Nacional de España. Se encargaóde la asesoría literaria de la Editorial Alhambra, colaboró en la Sección Bibliográfica del CSIC y en la Sección de Publicaciones de la Universidad Central de Madrid, y en esta época publicó algunas de sus obras poéticas más importantes: Ansia de la Gracia, Mujer sin Edén...
En 1956 Carmen y Antonio gestionaron la cesión al Ministerio de Educación Nacional del archivo de Rubén Darío, que estaba en poder de su última compañera, Francisca Sánchez.
El 28 de julio de 1968 murió Belmás
Carmen fue la primera mujer elegida académica de número de la Real Academia de la Lengua, ocupando el sillón "k", en 1978.
A partir del año 1982 comenzaron a manifestarse los síntomas de la enfermedad de Alzheimer, a pesar de todo se mantuvo activa y en 1987 le fue concedido el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil por Canciones de nana y desvelo.
Entre 1992 y 1996 vivió en una residencia en Majadahonda (Madrid), donde murió el 8 de enero de 1996.

Entre los premios obtenidos, se destacan el premio de Novela Elisenda de Moncada en 1953, el Premio Internacional
de Poesía Simón Bolívar
 en 1957, el premio Doncelen 1960 y el Premio Nacional de Literatura 1967.
Su obra poética se resume en la antología titulada «Obra poética» que abarca obras de los años 1929-1966 y las publicaciones «Brocal» , «Poemas a María», «Corrosión», «La noche oscura del cuerpo», «En la tierra de nadie» , «Los poemas del mar Menor»,
«A este lado de la eternidad», «Cancionero de la enamorada» y «El tiempo es un río lentísimo de fuego».
Falleció en Madrid en 1996.


Fuente: https://www.escritores.org/biografias/201-carmen-conde-abellan

Juan Marsé: una vida de película

Hoy se recuerda a Juan Marsé, escritor español que nació  el 8 de enero de 1933 en Barcelona con el nombre de Juan Faneca Roca, pero tras la muerte de su madre en el parto fue adoptado por un matrimonio, de quienes tomó sus apellidos, pasándose a llamar Juan Marsé Carbó.
Sin terminar sus estudios, se dedicó desde la adolescencia al oficio de joyero. Trabajó durante algún tiempo en la revista barcelonesa de cine Arcinema, e inicia su carrera literaria en 1958 con unos relatos que aparecerían en las revistas Ínsula y El Ciervo. En 1959 obtuvo su primer premio literario, el Sésamo de cuentos por su relato Nada para morir y dos años más tarde publicó su primera novela Encerrados con un solo juguete. También en 1959 se instaló en París, ciudad en la que residiría hasta 1962 y en la que desempeña variadas actividades, incluidas las de profesor de español, traductor y mozo de laboratorio en el Departamento de Bioquímica Celular del Instituto Pasteur.
Vuelve a barcelona, donde publica, en 1962, Esta cara de la luna, hoy repudiada por el autor y desterrada del catálogo de sus Obras Completas. También colaboró con el mundo publicitario, con el de la empresa editorial y fue guionista cinematográfico. Como periodista ha sido redactor jefe de la revista Boccaccio y colaborador de la revista Por favor, en la que llegó a ocupar el puesto de jefe de redacción.
Se casa en 1966 con Joaquina Hoyas, de la que tendrá dos hijos, Alejandro, que nace en 1968, y Berta, en 1970; en este mismo año aparece su excelente novela La oscura historia de la prima Montse, donde encontramos las claves del universo literario que ha seguido cultivando hasta el presente.
Asimismo, durante los años 1988-89, publicó quincenalmente un serial en el diario El País bajo el título Aventuras del capitán Blay.
La década de los 90 supone la consagración definitiva del escritor barcelonés. En 1990 recibe Premio Ateneo de Sevilla por El amante bilingüe; en 1994 le conceden por El embrujo de Shangai y el Premio de la Crítica. 
Su obra ha sido traducida a diversos idiomas (alemán, francés, húngaro, inglés, polaco, portugués, rumano.., etc.) y varias de sus novelas han sido adaptadas al cine y al teatro, como Últimas tardes con TeresaSi te dicen que caíLa muchacha de las bragas de oro y El amante bilingüe, entre otras.
El 21 de abril de 2009, 2 días antes de recibir el Premio Cervantes, se le concedió una urna en la Caja de las Letras.​ 
Es padre de la también escritora Berta Marsé.


Ayudante de laboratorio, por Juan Marsé.

ELMUNDOLIBRO

Cierro los ojos. Intento rescatar, entre la vorágine de 66 veranos vividos, el peor verano de mi vida. Casi no conservo recuerdos de los cuatro o cinco primeros, lamentablemente. Pero estoy totalmente seguro de que mi peor verano no se cuenta entre ellos. Cierro los ojos para ver si entre ese cegador laberinto de veranos distingo el más penoso, el que se torció, y para mi sorpresa, la primera pulsión de aquel negrísimo estío me llega a través de los sentidos. 

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