jueves, 2 de septiembre de 2010

Ella se siente a veces...

Ella se siente a veces
como cosa olvidada
en el rincón oscuro de la casa

como fruto devorado adentro

por los pájaros rapaces,

como sombra sin rostro y sin peso.

Su presencia es apenas

vibración leve
en el aire inmóvil.

Siente que la traspasan las miradas

y que se vuelve niebla
entre los torpes brazos

que intentan circundarla.

Quisiera ser siquiera
una naranja jugosa
en la mano de un niño

-no corteza vacía-
una imagen que brilla en el espejo
-no sombra que se esfuma-
y una voz clara
-no pesado silencio-
alguna vez escuchada.


Alaíde Foppa


De madre guatemalteca y padre argentino, nació en Barcelona en 1914. Vivió algunos años en Argentina y pasó la adolescencia en Italia. Casada con ciudadano guatemalteco adoptó la ciudadanía guatemalteca. Por razones pólíticas debió exiliarse en México por algunos años.
Sus indiscutibles méritos intelectuales le permitieron
ocupar la cátedra de Literatura Italiana en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de México. Asimismo, fue fundadora de la cátedra de Sociología de dicha Universidad y catedrática en la Facultad de Humanidades de la Universidad de San Carlos de Guatemala. En 1980 regresó de su exilio. Al poco tiempo de llegar fue secuestrada y desaparecida por el gobierno del dictador Romeo LucasGarcía. Sus restos nunca fueron hallados. De su obra poética merecen destacarse: «La Sin Ventura», «Los dedos de mi mano», «Aunque es de noche», «Guirnalda de Primavera», «Elogio de mi cuerpo», «Las palabras y el tiempo». Tradujo al español El ave Fénix de Paul Eluard, y la Poesía de Miguel Angel.

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